domingo, 14 de septiembre de 2014

Boya 16 y la historia de la pala del timón.

Este sábado el Savreh salió de nuevo con el grupo de Carpe Diem, con un niño de 8 y otro de 5 años. Esta vez conseguí convencer a Ignacio para que viniese con nosotros y se lo pasó muy bien.

Salimos a vela y pasamos por al lado del buque de aprovisionamiento de combate Cantabria, que estaba amarrado en los muelles de Cantabriasil. Está en Santander para el mundial de vela, que ya ha comenzado y se puede visitar. Nos saludaron los marineros y a los niños les hizo mucha ilusión.

El B.A.C. Cantabria.

Ignacio saludando a la tropa.

Luego fondeamos toda la flota alrededor de la boya 16, al S del pantalán de Calatrava porque una motora con un "donut" iba a pasear a los niños que quisiesen. Había mucha corriente de la marea que subía y un par de barcos garrearon. Yo con el "porsiacaso" ni me moví. Ignacio no se apuntó a lo del "donut" y nos quedamos en el barco, se puso a llover y nos metimos dentro. 


El pantalán de Calatrava y la boya 16 (roja por ser par) que delimita la canal de Astillero.

Al rato apareció la zodiac de la Guardia Civil, porque entre niños y adultos, en la motora iban 10 y estaba despachada para 6 personas, les pidieron los papeles, pero al final se quedó en un apercibimiento. También fueron a reñir a uno de los barcos, que estaba fondeado unos metros por dentro de la canal, al lado de la boya 16. Hay que fondear fuera de la canal. Las normas son para todos y hay que cumplirlas.


La flota fondeada por detrás de la boya 16


Cuando volvieron los niños de dar botes en el "donut" se secaron, merendamos y nos fuimos al Cherne a través del Corto Maltés. En el Cherne, que es más grande, Ignacio se puso a jugar con otros niños al parchís y al juego de la oca, le pusieron fanta naranja y patatas fritas, estaba encantado.

Volvimos a Puertochico a motor cuando estaba casi anocheciendo y en el pantalán estaban Mar y Sofía esperándonos. 

Estuvimos hablando con A.P. que había participado también esta tarde en el grupo de Carpe Diem. Nos contó que el había tenido un Etap 23i y que lo había disfrutado mucho. Nos contó también una inquietante historia sobre el barco. El caso es que la pala del timón también está rellena de espuma de poliuretano, para que flote. A él se le deslaminó yendo hacia Santoña, se metió el agua por dentro de la pala y se le abrió en dos. Al final se le partió. Tuvo que pedir remolque y lo pasó muy mal.

No sabía de esta aventura y en los foros de Etap franceses y belgas que ojeo por internet, no he visto que nadie haya tenido ese problema. El invierno pasado yo detecté una grieta en el lado de babor de la pala y la llevé a laminar. Le recortaron bastante sección de fibra y la laminaron de nuevo, creo que ha quedado muy bien y espero no tener ese problema.

La pala de timón cuando la llevé a laminar, con toda la sección que lijaron. El el centro ya se ve, un poco más amarillo, la espuma de poliuretano.

Luego, ya de noche, nos fuimos a dar una vuelta por las casetas del mundial, que estaban repletas de gente.

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