viernes, 15 de abril de 2016

Como en casa.

Hablando en términos urbanísticos, el medio metro cuadrado del salón-comedor-cocina del Savreh, tenía antes una alfombra oscura de rizo de scotch-brite que recogía mucha porquería. Además estaba suelta, tenía el peligro de que cuando entrabas en la cabina con el barco escorado, se patinaba y te podías caer. Algo hay que poner, porque el suelo original es el mismo fondo del casco, con el gel-coat simplemente pintado y patina mucho.

En casa hemos colocado un pavimento vinílico imitación madera de 4mm de espesor, lo hemos colocado Mar y yo, así que ya tenemos práctica. Como sobraron dos cajas, he decidido colocarlo en el suelo del interior del barco. En casa lo hemos colocado simplemente posado (espero que el edificio no escore mucho en los próximos años), pero en el barco, lo he pegado con un adhesivo de montaje.

Creo que ha quedado muy chulo, es un pavimento muy resistente, flexible, ligero, y no desliza mojado y con los pies descalzos. Colocado en otros edificios, parece que aguanta muy bien los rayos solares.

Las tablas se cortan simplemente con un cuter.

He empezado del eje hacia los laterales para hacer la forma del pie de la mesa.






2 comentarios:

  1. ¡Que bien ha quedado!. ¿Serviría también para la bañera, en el exterior?. Un saludo

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  2. Su uso no está recomendado para exteriores, pero a lo mejor se puede hacer un experimento en el fondo de la bañera. Lo peor que puede pasar es que se lo coma el sol...

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